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Imperio (Crisis del cerebro)
Mi pensamiento, mi intelecto y mi comunicación están bloqueados y no pueden fluir con libertad. Se produce un estancamiento que no es compatible con el flujo natural de mi energía vital. Dominio se expresa en forma de pensamientos obsesivos y prejuiciosos. Debido a este bloqueo mis energías no consiguen fluir de manera saludable y una crisis se avecina. El dominio se manifiesta en opiniones despiadadas e indiscretas, insultos y comportamiento soberbio. Bajo el dominio aparento ser impasible, autoritario y me muestro frío con mis pares. Sólo admito mis argumentaciones, soy sordo ante las criticas y reprimo toda opinión diferente a la mía. Solo cuenta lo que me es provechoso. Rechazo las emociones por no ser científicas ni realistas. El dominio desarrolla un enfoque dogmático y estrecho de la vida. Controlo mi entorno con soberbia y autoridad y no consiento las inclinaciones hacia lo espontáneo o lo afectuoso. Resuelvo este estancamiento de energía vital con pensamientos y actos conscientes. Supero mis propios límites a fuerza de corazón y de consciencia. Eso me da fuerza para la autorrealización, la claridad mental y el conocimiento de mi mismo.
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